Juegos al aire libre todos a disfrutar…
En primavera, en verano, cuando no hace demasiado calor, en otoño cuando no llueve y en invierno si el clima lo permite: siempre es posible encontrar un momento adecuado para los juegos al aire libre para niños. Hemos hecho una pequeña lista: juegos tradicionales para niños, los de toda la vida, esos que nunca pasan de moda.
Para estos juegos al aire libre para niños sólo son necesarios: amigos… Por lo demás, nada o casi nada. Llevar agua por si los niños sudan y algo de comer por si tienen hambre.
Carrera de sacos
¡Que levante la mano aquel que nunca haya jugado a este juego!. Difícil, ¿no? Se trata de uno de los juegos al aire libre para niños más populares. Prepara tantos sacos como jugadores. Una línea de salida y llegada hará el resto. La diversión está asegurada, puedes utilizar incluso fundas de almohada.
Carrera de tres patas
Es un juego en el que la coordinación de los niños es más importante que la velocidad. Divide a los participantes en parejas o tríos. Se tienen que colocar uno al lado del otro. Después ata una pierna de cada miembro con un pañuelo o chaqueta. Cada pareja o cada trío tiene que llegar hasta la línea de meta, andando o corriendo. La cooperación del equipo es fundamental para no perder el equilibro. La primera pareja que llegue a la meta es la ganadora.
La topa
El pilla-pilla es uno de los juegos para niños al aire libre por excelencia. Un niño cuenta hasta diez desde una base. Después, persigue a los demás mientras estos huyen. El niño que logra tocar la base durante la persecución queda salvado, aquel que es tocado es eliminado.
La rayuela
Hay una versión de este juego tradicional para niños en todos los países del mundo. Existen varias formas de pintar la rayuela en el suelo. Sin embargo, la más común es pintarla con tiza en forma de cuadrados. Se pinta un cuadrado con el número 1 dentro, y así sucesivamente hasta el número tres. Cuando llegamos al 4 se pintan dos casillas, una al lado de la otra con el número cuatro y otra con el número cinco. Después colocaremos un cuadrado con el 6 y volveremos a dividir la línea en dos casillas con el siete y el ocho. Después, otro piso con el cuadrado del nueve, seguido del diez. Se tira una piedra pequeña que deberá caer dentro del cuadrado. Se tiene que alcanzar saltando de casilla en casilla a la pata coja, después regresar a la línea de salida. Sólo en las casillas dobles se pueden apoyar ambos pies. Se repetirá la operación desde el número uno hasta el diez. El objetivo es tirar la piedra hasta completar todas las casillas.